lunes, 6 de junio de 2011

Madame Noir: La Oda Tragicómica al Exceso de Mónica Naranjo


Mónica Naranjo siempre dice que el personaje de Mónica Naranjo se queda en el escenario y en su casa va en chándal... Pero Madame Noir es diferente: Monta el numerito al más puro estilo de Gloria Swanson en "El Crepúsculo de los Dioses" (salvando las distancias) en su backstage y la palabra "chándal" tiene pinta de sonarle a costa serbia... Hemos visto recientemente el nuevo espectáculo de MN. Ésta es nuestra opinión.

Situados en la primera fila del Auditorio, esperábamos con ganas la llegada de "Madame Noir", un nuevo show muy naranjero del que sabíamos que tenía tintes teatrales... y tanto. Pero lo que no esperábamos era la cercanía de la artista en comparación con su "Adagio", y nos explicamos: Tras una intro organizada por uno de sus "actores" (ergo, su creativo), MN entró por la salida de emergencia entonando "Lágrimas de Escarcha" y, caminando por el hueco entre la fila 1 y el escenario, se paró ante nosotros y nos cantó un trocito de su tonadilla. A cuadros. Dicho esto, vamos a dar una valoración general: Cuando el repertorio del espectáculo a simple vista no parece convincente, pecando de poco extravagante o simplón o que, simplemente, está basado en descartes y en canciones que son poco conocidas por y para el gran público puede caerse en el error de minusvalorar un show antes de haberlo visto, o directamente no entrar a verlo. Craso error, porque "Madame Noir" es mayúsculo, todo un canto a lo excesivo hecho por y para el lucimiento de la diva, tanto la real como la interpretada al son del piano del gran Pepe Herrero.

Alardes vocales infinitos, interacción con el público e interpretación de Madame Noir de las canciones de Mónica Naranjo son las grandes bazas de un concierto-sátira-ópera bufa en el que el simple acompañamiento de un piano es la mera excusa para que la artista se autoparodie... porque, no nos engañemos, "Madame Noir" es una pretensión para que MN se ría de sí misma en base al concepto "diva" del que se ha alimentado durante tantísimos años, ¿autobiografía (artística, se entiende) requeteexagerada? Probablemente, pero la ambientación en el backstage de un plató de cine de los años 50 es pura ornamentación, al que han querido añadir más valores que el amor y el lujo: Soledad, falsedad, tristeza, despotismo... Toda una tragicomedia sostenida por su protagonista y muy bien secundada por no-actores debutantes mudos, un no-actor haciendo su papel de director y un público completamente entregado. Una historia divertida, histriónica, de la decadencia de una diva petarda con un repertorio muy bien ensartado para no desvirtuar el hilo de la historia.

De las canciones, por destacar algunas, "E Poi", "Abismo", "Para Siempre" "Balada para mi Muerte" o "Insensatez" (la que pensábamos que era la más aburrida, pero payasizada por MN hasta decir "basta") y "Nessum Dorma"... un alarido final que arranca casi 15 minutos de ovación por un auditorio puesto en pie... Su voz suena sensual, desgarradora, gatuna, histérica y cálida según lo que se pida... Como momento más entrañable, señalar que "E Penso a Te" fue cantada desde la primera fila a los oidos de una anciana que estaba presenciando el show, pero no sólo hay detalles dulzones, ella se pone delante de los simples mortales y les pregunta "¿A que te gusto un montón?", hace el indio todo lo que puede y más, pide "desinfección" a "Polvitos", su maquillador, cuando le besan la mano, se lamenta de vivir eternamente a dieta, y desea una bañera de spaghetti, se mofa del amarillismo de la prensa como víctima suya, pide iluminación antipapadas... Es como si Mónica Naranjo se transformara en una Estella Reynolds high class y a tope de tímbrica.

En fin, el último giro de tuerca de Mónica Naranjo es de lo mejorcito que se puede ver en directo a día de hoy: Estirando el personaje más que nunca, da lo mejor de sí y eleva el listón gracias al insoportable e inolvidable ego de Madame Noir, pero a la vez puede ser un punto débil porque... ¿Qué será lo siguiente?

Les dejamos con "E Poi". Echen un ojo y entenderán todo lo que les hemos dicho .


Hala, hala, mañana más...

No hay comentarios: